Si no comprendes y tienes en mente estas premisas; mejor dedícate a otra cosa.
1. Premisa del Precio. En primer lugar, debes demostrarte a ti que puedes soportar la vida de un vendedor, porque no es una carrera fácil. Es verdad que las recompensas son grandes, pero requieren de pagar un precio que muy pocos están dispuestos a pagar.
2. Premisa de la sabiduría. Debes recordar que en las ventas como en todas las carreras de importancia, solo se alcanza la victoria después de muchas luchas, incontables derrotas y aprendizaje continuo.
3. Premisa de la preparación. Debes estar preparado para alcanzar la sabiduría de todas esas experiencias y seguirte preparando. La mayoría de los que no venden, nunca se preparan. Sin embargo, aprender por experiencia lleva mucho tiempo y si requieres tener éxito en el menor tiempo posible, tendrás que capacitarte con las personas que ya han recorrido ese camino y que te quieran compartir realmente esa sabiduría.
4. Premisa de los hábitos. En realidad, la única diferencia entre aquellos que han fracasado y aquellos que han tenido éxito, reside en la diferencia de sus hábitos. Los buenos hábitos son la clave de todo éxito. Los malos hábitos son la puerta abierta al fracaso.
5. Premisa de la inocencia. Si crees que hay un solo método, frase, fórmula o "tip" para lograr muchas ventas, estas siguiendo el camino de los fracasados. El proceso de venta es mucho más complejo y requiere de muchos factores de los cuales debes tener control. No permitas que te vendan una solución fácil, pues si eso existiera, todos venderían mucho y venderían igual.
6. Premisa de la meta. Los premios de la vida se encuentran al final de la jornada; nunca al comienzo. Nunca sabrás cuantos pasos son necesarios para alcanzar la meta, así que solo debes de seguir avanzando. Jamás sabes cual cerca estas del éxito a menos que logres pasar el siguiente obstáculo.
7. Premisa de la satisfacción. Nunca quedes satisfecho con los éxitos del ayer, ni te entregues tampoco a la alabanza personal por hechos que en realidad son demasiado pequeños para aún ser reconocidos.
8. Premisa de la inteligencia emocional. Debes ser dueño de tus emociones, así como comprender y reconocer las emociones de los demás. No juzgar a una persona por una sola llamada o visita y no dejar de buscar mañana a al que hoy demuestra desinterés, porque los que hoy no son clientes, lo pueden ser mañana y siempre es mejor dejar una puerta abierta.
9. Premisa de la disciplina y orden. No puedes tener éxito en las ventas sin un plan y una organización que posteriormente se ejecuten como debe de ser te guste o no. Por último, mídete en cada paso. La premisa más importante en este punto es: “Lo que no se mide, no se puede mejorar”.
10. Premisa del cambio. Hay que recordar que, nada de lo que has hecho hasta ahora te va a mantener ahí. Debes de seguir mejorando, innovando y aprendiendo.
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